Los preparativos de la primera comunión de Jimena los he vivido muy de cerca porque Sara Fernández, su madre, es la jefa de moda de Vogue y como a las dos nos gusta el cursillo y los detalles, no hemos parado de enviarnos por Instagram fotos de flores, vestidos y lazos durante los meses previos al gran día. Como en todas sus producciones, Sara ha sido impecable sin que se note. Siempre digo que es como la niña de tu clase que decía que iba a suspender y luego sacaba sobresaliente, ella nunca «tiene nada» y luego hace cosas maravilloso. Y si no, mirad estas fotos.
El vestido que llevó Jimena era el mismo con el que Sara hizo su primera comunión. «Mi madre lo diseñó inspirada en uno que llevó Carlota Casiraghi cuando era niña. Estuve dos meses probándome el vestido que cosió y bordó una costurera de Pontevedra», recuerda. Para Jimena lo arregló Helena Mareque que no paraba de repetir lo bonito que quedaría en una novia.
Los recordatorios y toda la papelería estaba hecha a mano para la ocasión por Bag.Design.
Sara y su familia recibieron a los invitados en La Casita Rosa de Cuidalcampo, una monada de emplazamiento perfecto para eventos. Lo decoraron con globos y adornos de The Milkshake Room y flores que montaron entre Sara y sus hermanas Patricia de Indietro y Bea de Fashionistas en jarrones de porcelana de Soraks. El catering fue de Cristina Oria, que como siempre resultó impecable.
La animación, el carrito de algodón de azúcar y la cama elástica lo preparó La Societé.
Todas las fotos son de Juanlu Real.
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Geniales las fotografías para buscar inspiración