El norte tiene algo mágico… Lo mismo sucede con Gaztelur en Biarritz, que tiene un espacio encantador. Lo que más me gusta es su interior de estilo invernadero, cuyos techos y paredes están acristalados dejando entrever sus jardines y la flora que le rodea. El catering es excepcional y está decorado por Marta de la Rica con un gusto exquisito.